31.12.11

Un cuaderno más que cierro

Estabamos Andrés y yo en un parque al que nunca había ido…

Hacia mucho frio y los dos espabamos bien abrigados, bufandas, chamarras, yo usaba unas botas que ahorita andan bastante de moda, Andrés unos tennis que parecían de esquimal y ambos usábamos un gorrito…

Íbamos caminando y platicábamos, reíamos, me abrazaba, etc.

-Mañana vas a tener la oportunidad de cambiar absolutamente todo lo que quieras, de sacar lo que ya no quieras de tu vida, y de tener absolutamente todo lo que quieras en tu vida.- me dijo mi queridísimo amigo.

Yo sonreí con ironía, ya estoy muy acostumbrada a aquellas frases que Andrés solía decir.

-Sí Andrés, usando polvos mágicos.- contesté

-Es aun mejor que los polvos, solo ponte a pensar muy bien y reflexiona bien, no cometas tonterías Alejandra, que te encantaj a ti las tonterías, promételo.- me contestó bastante pícaramente.

-Está bien Andrés, te lo prometo.-

Continuamos caminando y lo abracé.

-Te extraño mucho.- le dije soltarlo.

En ese momento desperté.

Miré mi celular y caí en la cuenta de que hoy estamos a 31…

Por supuesto me desperté con lagrimas, ya que siempre ocurre así cuando sueño con Andrés, pero esta vez, en lugar de esconderme entre mis sábanas, y no querer salir, y ya sabes, drama, me incorporé (seguía acostada) cerré mis ojos, y tuve cientos de “flashbacks”, escuche miles de frases, vi a muchísimas personas, unas que llegaron y me marcaron y otras que ya estaban aquí y me regalaron más enseñanzas, todo eso en cuestión de minutos…

Te prometo que me sentí agotada con tan solo recordar tanto que viví este año...

Pero entonces me puse a pensar, y en realidad, qué enseñanza me dejó este año?

Que aprendí?

O más bien…

De qué sirvió este año?

Que es realmente el fin de año para mí?

Creo que nunca lo había pensado, y en efecto el sueño que tuve me hizo pensar muchísimo.

Ya está aquí la GRAN fiesta que se celebra en todo el mundo, sin importar las personas, la religión, etc, todos están celebrando el año nuevo.

Y es que, si fuera un día común, no nos importaría estar empezando otro año.

Creo que el 31 es el verdadero día en que tenemos absolutamente toda la magia que podemos querer, tenemos absolutamente todo el poder… Si, te estoy hablando de magia, si también te estoy hablando como narrador de cuentos de Disney, pero antes de que cierres esta pagina y dejes de leer, quiero explicarte.

Todos, absolutamente todos, cometimos muchos, pocos, mas o menos, errores este año, que nos hubiera gustado “no cometer” o “cometer de otra forma” o “en otra situación”.

Todos tuvimos por lo menos una discusión este año, tal vez unos hirieron más que otros con las discusiones.

Todos dejamos metas sin cumplir (por lo menos una, no te hagas)

Algunos perdimos a alguien que hubiéramos querido nunca perder.

A todo esto yo lo llamo como “baches, que se presentaron este año”.

Quiero invitarte a que vuelvas a leer los “baches” y que pienses si estuviste en alguna de las situaciones, como te sentiste, que dijiste, que pensaste cuando te pasó.

Y ahí es cuando entra esa “magia” de la que Andrés y yo te hablamos.

Este año, más que nunca, tienes la oportunidad de comenzar de nuevo, tienes la oportunidad, de decir “este año no cometo ese error”, de pedir perdón a la persona que ofendiste con tu discusión, de pensar que meta no cumpliste y decidir si este año si la quieres cumplir.

Los que perdimos a alguien, de darnos cuenta de que las personas no van a estar siempre, y tomar este año para disfrutar mucho más a quienes queremos.

Esta magia de la que hablo también entra en otras fases.

Por ejemplo.

Todas esas personas nuevas que llegaron a sacarte no una si no, millones de sonrisas.

Todas esas experiencias que dijiste “increíble”.

Todas esas risas, abrazos, besos, te quieros.

Y personas que ya habian estado antes, este año te regalaron más momentos.

Todo eso que aprendimos, el sentimiento cuando ayudamos a alguien!

Yo lo llamo “Alimento del año para el alma.”

Este día también tenemos ese poder y esa magia de decidir cuantos momentos más así queremos.

Y por ultimo.

Los propósitos, y las uvas. (acompañados de las maletas, los calzones de colores, etc)

Todos, absolutamente todos, aunque tu digas que nunca haces propósitos, tenemos ese “ahora si, este año…”

Pues ya llegó, al fin, el día en el que vas a poder decidir si este año SI quieres cumplir tus propósitos o no, si vas a dejar metas al aire o no.

Y en cuanto las uvas y derivados.

Esta en tus manos si quieres realmente que esos “deseos” se cumplan, nadie más, esta en ti.

A lo que quiero llegar es que en un momento puedas creer todo eso que dicen de que “si quiero puedo” y que este día es un gran día para demostrarlo, para que por primera vez en tu día manejes el año como gustes.

Y después de todo esto quiero darte mi reflexión final del año.

Hoy le encontré sentido a “las uvas” a “los propósitos de año nuevo”

He de confesar que fue un año bastante difícil, que pasaron muchas cosas este año que me vinieron a afectar bastante, que fueron muchos momentos “difíciles” y que yo contaba día con día para que por fin llegara el 31, le diera una patada al 2011 y lo echara fuera, sin dejar rastro.

Pero ahora que ya estamos aquí, creo que si hago eso, estaría desperdiciando 365 días, como si estuviera tirando en el triturador de desechos una pizza completa, recién hecha, solo porque en vez de ser solamente de pepperoni, tenia también champiñones, no sé si me explico.

Me pasó de todo, literal de todo, o sea hasta bromeo diciendo que lo que no viví en 17 años lo vivi en este.

Viajes, discusiones, amigos, ex amigos, amoríos por doquier, dramas, gente nueva, competencias, cambio de look, terminé la prepa, tatuajes, todo, así de todo me pasó.

Y si fue un año bastante desgastante.

Pero por un lado fue un año desgastante para bien, porque aprendí muchísimo, cosas que ni te imaginas, cosas que ya te compartí por aquí y que te iré compartiendo si me lo permites el siguiente año.

Y, aunque no me creas, quiero dar las gracias por este año que pasó.

A estas alturas es bastante predecible, pero te voy a platicar que escribo en un diario todos los días, escribo reflexiones, cosas que me pasan, etc, y es un diario que exactamente se termina cada año que pasa.

Entonces cada año nuevo lo relaciono así.

Como un año que terminó, un cuaderno que tengo que cerrar.

Y el año nuevo, es un cuaderno completamente nuevo, ni una pluma lo ha tocado (ni lo va a tocar) más que la mía.

Año nuevo es el cuaderno COMPLETAMENTE en blanco, donde YO voy a decidir que escribo, a quienes menciono, a quienes ya no quiero mencionar, que voy a aprender y es un cuaderno que dentro de un año voy a leer, voy a sacar lo mejor de esos escritos y lo voy a cerrar, para guardarlo en el cajón de “los años anteriores”.

Y como es un cuaderno completamente en blanco, todos esos rencores, malos ratos, pleitos etc, se quedan en el cuaderno anterior, se quedan dentro del cajón, así, sin más, porque asi como yo tengo un cuaderno en blanco, los demás lo tienen, y tienen todo el derecho de escribir de forma distinta, en pocas palabras ya perdoné con todo ese amor que escribi en mi diario, y ya no queda nada malo, ahora todo comienza otra vez, en blanco, esas personas, que me lastimaron, las quise tanto (de lo contrario no me hubieran lastimado) que ya todo quedó atrás, que todo comienza de nuevo.

Te invito a que compres un cuaderno nuevo, donde mañana escribas, solo con lo que quieres comenzar, solo con lo indispensable del año pasado, nada más.

Todo en su lugar, todo en donde debe de estar.

Este año quiero hacer las cosas un poquito diferentes, el año que pasó aprendi que quiero ser YO completamente, en mi totalidad, importándome poco la opinión que tengan los demás, quiero ser lo suficientemente valiente como para defender en un 100% lo que idealizo, y quiero dejar de ser tan prudente.

Este 2012 quiero el 31 poder decir “valio la pena cada minuto de este año” y es algo que como me dijo Andrés yo tengo la “magia” y el “poder” de decidir.

Quiero regalarte esta magia, este poder.

Estaba pensando y sí han sido muchas personas super especiales este año, me encantaría escribirle a todas de manera personal, pero se que no es necesario, que cada persona sabe con exactitud que marcó mi vida.

A mi alimento para el alma, a esas personas con quien voy a compartir un año más, gracias por seguir aquí, a mi lado.

A mi familia, creo que nunca terminaré de escribir lo mucho que los amo y todo lo que les tengo que agradecer.

A ti, que estás leyendo mi blog quiero darte las gracias por una enseñanza, por un momento especial, gracias por dejarme muy en claro que es lo que quiero este 2012.

Extraño, ese extraño tan peculiar, que me inundo con tanto veneno, a ti en especial quiero darte las gracias, a ti en especial te debo este 2011, es cierto que existe una persona en la vida que nos da muchas cosas de manera única, que logra entrar en la persona de manera abstracta, gracias por ser la persona que me enseñó tanto, gracias por tantas risas, tantas platicas, tantos abrazos sinceros y lo mejor, gracias por tantos te quieros que sentí tan reales, por demostrarme que te tienes que quedar en el cuaderno pasado, y que tengo que llevar conmigo solamente todo lo que aprendí de ti, a ti mi piedrita en el zapato de todo el año, te debo casi por completo este 2011 y te quiero con el alma.

A ese grupo de muchísimas personas que nos volvimos uno mismo, y lo demostramos un fin de semana de Noviembre, mi segunda familia, mis personas favoritas, gracias por acogerme entre sus brazos, todos y cada uno, por su cariño, por las risas que compartimos, gracias por ganarse mi corazón en tan solo un año, y al responsable de todo esto a mi amigo pero también a mi guía en este largo camino de la pasión que tengo por este deporte, a un tal Casanova, nunca terminaré de agradecerte absolutamente todo lo que has logrado y hecho por mí como persona.

A todos aquellos que les llamo mi “regalo sorpresa” a todos los que conocí este año, o que comencé una amistad inolvidable, gracias por ser esa sorpresita tan hermosa de mi 2011 por quedarse aquí.

A quienes se marcharon porque quisieron, les quiero dar las gracias, porque me mostraron el verdadero camino que tengo que seguir, por abrirme tantas puertas, por dejarme una de las enseñanzas mas importantes, les deseo a ustedes en especial la mejor de las suertes en el siguiente año, y les deseo de todo corazón lo mejor.

A ti que me enseñaste que querer es poder, que me abriste los ojos a una nueva y diferente forma de sentir, a ti que me diste todas las armas para aceptar ese lado de mi que quería ocultar, a ti gracias, porque me di cuenta de que entonces PUEDO a una persona.

A quien me hizo revivir pasión, a quien me hizo reir más que nunca, y a quien me hizo querer de una forma muy especial, a quien tiene un manojo de llaves, a esa persona en especial GRACIAS, por ser una persona más que se tiene que quedar y va a permanecer en mi cuaderno anterior con quien solo me quedaré lo aprendido, gracias por abrirme los ojos, te quiero con el corazón.

Y a ese viejo amigo que cada año esta conmigo, apoyándome, enseñándome, guiándome, te amo, un año más juntos.

Y por último, ese alguien tan especial, que está más cerca que nunca, aunque no te pueda ver, un día conocí a la estrella más brillante del cielo oscuro. Ese día conocí una parte de mi que tenia escondida. Mi ahora estrella. Te amo.

Y a ti a quien decepcione, a quien falle, perdoname, nunca fue mi intención, comencemos de nuevo.

No quise poner nombres porque tu que estás leyendo entras en alguno de mis párrafos.

Quiero seguir escribiendo para ti.

Pero quiero seguir escribiendo a partir de un cuaderno en blanco.

Espero haber cerrado con broche de oro el ultimo blogg del 2011.

Te deseo lo mejor.

25.12.11

A esto que le llamamos Navidad.

Pues ya está aquí.

Después de un mes de estar rodeados de copos de nieve, dulces, galletas de jengibre, gorritos rojos, de escuchar villancicos por donde pasamos, de ver en el trafico a todos los carros con pinos en el techo.

Ya llego este día que muchos, sobre todos, los niños esperan con ansiedad.

Un día que como era de imaginarse, a mi no me hace tanta gracia.

Y todo inició cuando comencé a preguntarme desde muy chica.

Porqué había tíos que solo veía ese día y que no recordaban mi nombre, me abrazaban efusivamente y me decían que me querían mucho? Confieso que yo me sentía mal, porque no les podía decir que los quería, porque en realidad no los conocía.

Porque si mis papás me hablaban todo el tiempo de humildad y sencillez, ese día parecía que mi papá y el hermano de mi mamá competían para ver quien le daba el regalo más llamativo a sus hijos y sobrinos?

Y en cuanto a Santa, porque si lo que el hacía era una buena obra, cuando yo salía con mi muñeca nueva, había niños en la calle pidiendo dinero para su regalo?

Porque entonces el famoso Santa no era equitativo?

Un día iba paseando con mi muñeca y mi carreola nueva con mi abuelita, vi a una niña de la calle, quise darle mi muñeca y mi abuelita me detuvo, me dijo que era MÍ muñeca que me había regalado.

Ahí comencé a darme cuenta de que en realidad algo no andaba bien con esta fecha.

Porque la tía que pasaba todo el tiempo en casa llorando, maldiciendo a su marido, ese día era la tía mas sonriente y era la pareja más solida con su esposo?

Y todos aquellos, que salían a las calles con millones de regalos para los más necesitados, cuando en el año, ni se molestaban en voltearlos a ver.

Comencé a decir, que en realidad no me gustaba la Navidad.

Siempre he estado en contra de la hipocresía, y este día se me hacía el día más hipócrita del año.

He recibido millones de criticas por eso, hasta me gané que alguien se molestara muchísimo con eso y me dijera que estaba cambiando la imagen que tenia de mi.

Todo esto, por no estar de acuerdo.

Me puse a pensar seriamente esta situación, y como hablé en mis blogs pasados, este año quise hacer algo diferente, quise sacar el lado positivo de esto.

A la conclusión a la que llegué fue la siguiente.

Creo que este día, en realidad es la esperanza que muchos buscan, es la oportunidad que otros tantos toman, para demostrar que realmente todo ser humano tiene un lado importante de bondad, que en verdad todos tenemos alma, un día que esperan para perdonar y ser perdonados, para estar cerca de sus familiares porque en el año no pueden, un día para decirle "te quiero" a esa persona que no has podido decírselo, un pretexto para darle un regalo a una persona que no te atreves a hacerlo en los 364 días restantes, para desearle lo mejor a otra persona.

Entonces, porque no transformarlo?

Porqué no, mejor convertir este espíritu navideño, en algo de todos los días, que esa bondad que todos tenemos sea diario. Que no necesitemos un pretexto para dar un regalo, para abrazar a alguien o decirle que lo queremos, que esas obras de caridad sean de diario, hasta en un detalle mínimo como ayudar a un ciego a cruzar la calle.

Me encantaría un día ver en la calle a una niña darle su muñeca nueva a una niña de la calle.

Me hubiera encantado ver a mi tía sonriente y amando a su esposo todo el año.

Perdonar en el instante, y pedir perdón en el momento que cometemos la falta, no tener que esperarnos hasta este día.

Que absolutamente todo lo que hagamos, sea del corazón, sea porque queremos, porque nos nace, no porque una fecha en especifico nos dice que tenemos que hacerlo.

Quiero invitarte, a que este día, también lo uses como un pretexto para reflexionar, para que pienses, que es lo que has hecho en todo el año y que es lo que has hecho estos dos días, y cual ha sido tu propósito, si realmente estás siendo coherente con tu espíritu.

Y es que en realidad, no es que me moleste la Navidad, es que no entiendo el comportamiento de estas personas en este día.

Siempre me baso en el respeto, y respeto absolutamente a todas las personas que me critican en estas fechas, y respeto su idea de la Navidad, pero en realidad, creo que el mensaje de esta fecha va mucho más allá.

Alguien me dijo hace poco "Sé que no te gusta la Navidad, pero me atrevo a desearte un bonito día" y en realidad no me molesta, al contrario me halaga, pero me halaga porque sé que las personas que lo han hecho, me lo han dicho con el corazón, porque me quieren.

Y son las personas que un día común me marcan y me dicen "Ale, que tengas un bonito día" así como yo lo hago.

Me gustaría que todos fuéramos así, que conviviéramos en un medio mas transparente, menos "fingido" por así decirlo

Este año hice una promesa, llegué a la cena de Navidad con la mentalidad, de que era una GRAN cena familiar, una noche, donde iba a poder convivir con familiares que no puedo ver en el año, y así lo hice, y disfruté la cena más que nunca, entonces abrazar a mis primos, abuelos y tíos, realmente me nació, decirles que los quería fue directamente del corazón.

Y entonces, curiosamente, no se me hizo larga la espera como mis primos que contaban los minutos para la hora de los regalos.

La hora de los regalos fue solo un plus.

Y es que en realidad, el mejor regalo que me puede dar la Navidad, es el hecho de que pude convivir en una totalidad, con el mejor regalo que me pudieron dar mis papás, mis dos hermanos menores.

No me queda más, que desearte una bonita Navidad, y mañana un bonito día, y después una bella semana y así sucesivamente :)

22.12.11

He aprendido que.

Una nota un poco vieja, que algunos ya han leído.



He aprendido que no puedes hacer que alguien te quiera. Lo único que puedes hacer es ser alguien que pueda ser querido. Lo demás, está en ellos.
He aprendido que por más que a mí me importe, habrá personas que no les va a importar. Y no es el fin del mundo.
He aprendido que no es lo que tengo en mi vida, si no, lo importante es a quienes tengo.
He aprendido que las personas que ahora están conmigo, tienen un propósito, y cuando lo cumplan, se van a marchar.
También he aprendido que hay personas que siempre van a tener un propósito conmigo.
He aprendido a perdonar mucho antes de que me pidan perdón, así habré sanado una herida sin tener que esperar a que la curen.
He aprendido a que no debo de compararme con lo mejor que pueden hacer otras personas, pero si con lo mejor que yo puedo llegar a hacer.
He aprendido que no se trata exactamente de lo que les pasa a las personas, pero si de lo que hacen por ello.
He aprendido que siempre que me despida de un ser querido debe de ser con un “te quiero” y un abrazo, porque puede que sea la última vez que los vea.
He aprendido que SI puedo seguir adelante, a pesar de que en un momento yo creía que no.
He aprendido que la persona que piensa que no me merece en lo absoluto, es la que más lo hace.
He aprendido que no solo tengo que ser perdonada por los demás, si no, es necesario que yo también deba de perdonarme.
He aprendido que no importa que tan deshecho este mi corazón, el mundo no se va a detener por aquella fisura.
He aprendido a decir las cosas exactamente como son, así no me presto a malinterpretaciones.
He aprendido que mi pasado y las circunstancias provocaron quien soy, pero yo soy responsable de en quien me pueda convertir.
He aprendido que solo porque dos personas discutan, no significa que no se amen. Y solo porque no discutan, no significa que si se amen.
He aprendido que dos personas pueden mirar exactamente la misma cosa, y verla completamente diferente.
He aprendido que no por que una persona tome distancia conmigo significa exactamente que me ha dejado de querer.
He aprendido que los besos, y los abrazos, deben de ser para personas realmente especiales para mi.
He aprendido que no importa las circunstancias, si soy honesta conmigo misma, puedo llegar más lejos en la vida.
He aprendido que mi vida puede cambiar en cuestión de horas, por la llegada de alguien que ni siquiera conozco.
He aprendido que prefiero que me digan las cosas literalmente, a estar descifrando.
He aprendido que por más daño que me haga una persona no puedo vivir con el eterno rencor, tengo que aprender a dejar ir, porque el rencor solo genera daños.
He aprendido que si decido seguir ahí, debo de atenerme a las consecuencias.
He aprendido que no es lo que compartes, si no con quien.
He aprendido que los sentimientos deben de ser manejados con pinzas, porqué son lo más frágil que tiene una persona.
He aprendido que un verdadero héroe, es quien hace lo que tiene que hacer cuando debe de hacerlo, sin importar las consecuencias.
He aprendido que a veces es tanto el amor, que se te sale de las manos, y no sabes cómo manejarlo con exactitud.
He aprendido que hay alguien que quiero con todo mi corazón, solo nunca supe exactamente como demostrárselo.
Igual he aprendido que debe de haber alguien que me quiera muchísimo, solo no sabe como demostrarlo, y su cariño no vale menos por eso.
He aprendido que mi corazón es lo más valioso que tengo, y no puedo entregárselo a cualquier persona.
He aprendido que a veces las cuando las personas están enojadas, tienen el derecho de estarlo, pero eso no les da el derecho de ser crueles.
He aprendido que la verdadera amistad continua creciendo con el paso del tiempo, aun con una distancia infinita de por medio, igual pasa con el verdadero amor.
He aprendido que las palabras SIEMPRE, y NUNCA, deben de decirse con sumo cuidado.
He aprendido que solo porque una persona no me quiera de la forma que yo quiero que lo haga, no significa que no me quiera con todo lo que tiene.
He aprendido que no importa que tan buen amigo sea, un día me va a lastimar, aunque sea una vez, y mi deber va a ser perdonarlo.
He aprendido que aun cuando crea que no tengo nada más que dar, cuando un amigo acuda a mí, voy a encontrar la manera de ayudarlo.
He aprendido que escribiendo, puede facilitar tanto el expresar emociones de dolor y amor.
He aprendido que las personas que más quiero, son las que la vida se las lleva más pronto.
He aprendido que la vida, me forma para ser independiente, cuando me vuelvo dependiente de algo, es necesario que se vaya.
He aprendido que debo de elegir muy bien a quien le voy a decir “te quiero” o “te amo”
He aprendido que es difícil determinar la línea entre ser amable para  no lastimar a los demás, y de sostener lo que realmente crees.
He aprendido que cuando le dices a alguien “te amo” estas cargando una responsabilidad muy grande con esa persona.
Y sigo aprendiendo, y me falta mucho más por aprender.
Estoy aprendiendo a querer, y ser querida.
Creo que estoy aprendiendo a vivir.

21.12.11

Carta de un huésped.

Querido hospedero:

Hace unos años que llegue a tu casa y me recibiste con los brazos abiertos.
He de confesar que no me ha faltado absolutamente nada contigo como anfitrión, y que he vivido muy bien en tu hogar.
Sin embargo desde hace ya varios meses que me he sentido el huésped incomodo.
Creo que llevamos varios años sin conocernos de verdad.
Y es que es normal que un completo extraño viviendo en tu casa se vuelva incomodo.
Quiero decirte hoy que tu huésped es una buena persona, sin vicios, sin malas intenciones.
Que tienes un huésped que lucha por destacar en la vida.
Tal vez no has puesto mucha atención en eso.
Querido anfitrión, siento desde hace varios meses que hay algo en mi que te molesta y te atormenta y no me has querido decir que es.
Tal vez es por la falta de confianza que nos tenemos.
Me gustaría saber que te acongoja, que te molesta, y así poderlo cambiar.
Anfitrión mío, quiero invitarte a escucharme, a leerme, a conocerme.
Quisiera poder pagarte de alguna forma tu hospitalidad, pero no tengo dinero todavía, pero quiero que veas mi hospedaje una inversión que el día de mañana te va a beneficiar mas de lo que crees que pueda perjudicarme.
He de confesarte que hay días en los que entro en frustración porque siento que soy una carga, que el que sigas aceptando que viva contigo es más por el gran corazón que tienes, porque sé que no me dejarías en la calle, y porque siento que tienes un gran compromiso conmigo.
Me han dicho que ya te pesa tenerme en tu casa, y me gustaría ya no ser una carga en tu vida, sin embargo me veo muy limitado, y no puedo hacerlo todavía, aun no estoy listo, pero en el momento en el que lo este, partiré.
Prometo hacer lo que este en mis manos para que así sea lo mas pronto posible.
Hoy quiero decirte que no quiero compromisos, que extraño los primeros meses en tu casa cuando realmente estabas contento de que habitara aquí.
Sé que otro huésped vive con nosotros, pero en cambio, siento que el realmente forma parte de tu familia, acaso es porque comparten exactamente los mismos gustos?
Quiero preguntarle el secreto para lograr que sean tan buenos confidentes.
Lamento no pensar como ustedes dos, me he esforzado para compartir los mismos gustos, pero me doy cuenta de que si me vuelvo exactamente como tú quieres, estaría siendo una persona falsa, que estaría fingiendo ser alguien que no soy, y estoy completamente en contra de eso.
El que seamos tan diferentes no quiere decir que yo sea malo, al contrario, si logras convivir con una persona tan distinta como yo puedes aprender muchas cosas.
He pensado en regresar a mi lugar de origen, pero lo encuentro imposible, en este lugar realmente tengo oportunidad de crecer, de ser alguien si me lo propongo.
Me he dado cuenta de que realmente me duele que no me conozcas, que aun tengas dudas sobre mi, porque de verdad, no soy una persona de quien debas de desconfiar, todo lo contrario.
Quisiera compartir de verdad contigo mis sueños, mis aspiraciones, mis logros y mis fracasos.
Y no superficialmente, como lo hemos hecho a lo largo de estos años, como tema de conversación en la comida, o como comentarios al aire.
Quiero invitarte a que un día lo intentemos, creo que tenemos más ganancia que perdida.
Sé que siempre estas saturado en trabajo y obligaciones, pero quiero que sepas, que yo estaré disponible aquí, sentado, esperando el día que tu elijas para convivir realmente conmigo.
Estoy contento en tu hogar, sin embargo a veces siento que me limitas mucho, que me oprimes un poco, y la mayoría de las veces yo lo permito porque siento que te lo debo por todos estos años viviendo aquí, sin embargo a veces me frustra y por eso hay días en los que me ves con mal humor.
Querido anfitrión, me siento frustrado.
Hospedero, creo que nunca te he dado las gracias realmente.
O bueno, si lo he hecho, pero no de la forma que tu quieres.
Confieso que no se la forma exacta aun, pero quiero agradecerte en esta carta, agradecerte por todos estos años de abrirme las puertas de tu hogar, por los alimentos, por el apoyo que he recibido.
Y créeme aunque a veces no parezca, vivo en constante agradecimiento contigo.
Gracias una vez más.
Atte: Tu hijo, tu huésped.

16.12.11

Extraño.

Extraño.
En este tiempo, en este lugar, mal empleado.
Creo que te veo llegar, que te veo pasar.
Volteas a verme, y cruzamos miradas.
Extraño, tu forma de mirarme es diferente.
Mi forma de sonreír cuando estás cerca es distinta.
Tu misterio me envuelve.
Extraño, pasan los días y te sigo viendo llegar, y te sigo viendo pasar.
Mi mirada no ha cambiado desde la primera vez que te vi a los ojos.
Extraño, quiero tomarte de la mano. Sonrío.
Me quiero acercar, extraño quiero quererte.
Me sonríes.
Extraño, te vuelvo a ver pasar, pero esta vez cambias de rumbo, te diriges a mí.
Extraño, estás aquí en frente de mí.
Me veo en tus ojos, y puedo darme cuenta de que no solo es un reflejo si no que realmente estoy dentro de ti.
Vuelvo a sonreír.
Extraño, quiero envolverte.
Esta vez los dos sonreímos.
Extraño, los días han pasado.
Errores, ya es muy tarde.
No te veo pasar.
Quien eres tú para hacerme esperar?
Te veo a lo lejos, caminas hacia otra dirección.
Busco tus ojos, no los encuentro.
Extraño, en dónde estás?
Apareces de nuevo.
Vuelvo a mirarte a los ojos, sigo viéndome dentro de ti.
Nos sonreímos.
Extraño, quiero abrazarte.
De pronto te veo alejarte.
Solo una posibilidad, solo un respiro, por si acaso solo una vez.
Regresas.
Te vuelves a ir.
Extraño, que sucede?
Porque tu sabes que te quiero, que te he querido desde hace mucho tiempo.
Extraño, llegas y te vas.
Extraño, ya no quiero que te marches si vas a regresar.
Porque no me miras a los ojos?
Quiero saber si sigo dentro de ti.
Ya estás muy lejos, extraño.
Extraño, alguien más llego, me miró a los ojos, estoy dentro de él.
Pero él en mi no, tú sigues en mí.
Y aun estando lejos, mantengo el sueño que estarás conmigo y nunca te irás.
Te busco.
Extraño, siento que dejo de respirar si ya no te veo más.
Estoy llorando, no puedo encontrarte.
Pero a pesar de todo, te sigo buscando.
Porque contigo, yo resistiría todo el infierno para sostener tu mano.
Daría todo, daría todo por nosotros.
Daría cualquier cosa y no me rendiría.
Porque sabes que te quiero extraño, y que te he querido desde hace mucho.
Y ahora me haces falta.
Estás demasiado lejos.
Regresas.
Me sonríes de nuevo.
Pero no me miras a los ojos.
Extraño, me dijeron que estoy viviendo en una fantasía, extraño me están diciendo que tus ojos no son reales.
Extraño, me están diciendo que tu mirada es falsa.
Hago caso omiso, no es cierto, yo sé que eres real.
Te vuelves a marchar.
Ya no quiero llorar, extraño.
Alguien más me quiere, alguien más me abraza.
Y tú estás demasiado lejos.
Pero tú sabes lo que quiero, lo sabes.
Quiero que digas, porque necesito, necesito oírte decir “Te quiero”.
Te he querido desde hace mucho.
Han pasado los días.
Sigues respirando, sigue respirando, porque nunca te dejaré.
Extraño, hoy volví a encontrar tus ojos.
Ya no estoy dentro de ti.
Extraño, tenían razón, tu mirada es falsa.
Extraño, me haces daño, te quiero, pero ya no quiero que mis ojos te miren pasar.
Extraño, ya no quiero que regreses, extraño, márchate.
Y es que después de tanto tiempo, de saber tu nombre por completo, de conocer todo de ti,
de ser confidentes.
Te llamo extraño, porque me doy cuenta de que realmente nunca te conocí.
Extraño, estoy llorando, quiero que te marches, pero te extraño con todo mi alma.
Han pasado los días.
Hoy te perdono, te perdono por haber estado lejos tanto tiempo.
Cree esto.
Buscaré encontrarme dentro de alguien más, buscaré que alguien más este conmigo.
Extraño, te has marchado.
Extraño, intenta descansar en mí y nunca me dejes ir.

12.12.11

Mejor que no lo digas

Había una vez... en el reino de Prudencia, un maravilloso palacio en el cual habitaba Hathor, un joven y sabio rey.

Vivía en esta espléndida mansión mármol multicolor y de piedras preciosas, junto a su hija Ellyon.

Cuando Ellyon nació, su padre, que siempre se ha caracterizado por adorar a su hija, preocupado porque no le pasara nada, mandó a llamar al hada más poderosa del reino, le pidió que envolviera a su hija en una gran burbuja rosa, lo suficientemente poderosa como para protegerla de que jamás la lastimaran, para que no sufriera ni un rasguño.

Y así fue, la magia de la burbuja era tan poderosa que lograba hacer sentir a Ellyon todo el tiempo feliz, sin preocupaciones, y así la princesa, nunca estuvo expuesta nada.

Y el noble rey nombró a aquella hada como su compañía eterna.

Ellyon era una princesa diferente, de pequeña estatura, tímida, siempre leyendo un libro distinto.

Caminaba por los enormes jardines del palacio dispersa, siempre con mirada perdida, el hada solo la seguía, a veces platicaban.

Su fama era principalmente por lo inteligente que era, porque a pesar de que casi nunca hablaba, cuando decía algo, sacaba a relucir toda la sabiduría que manejaba en su interior.

Pero, como todo cuento de hadas, en las lejanías del reino, en el lugar más árido y tenebroso, en una diminuta casa de paja, habitaba la malvada bruja Luisina.

En realidad, Luisina no deseaba el reino que heredaría Ellyon, ni su belleza, ni su inteligencia, y hasta le resultaba una persona agradable, esta bruja simplemente era malvada y ya.

Y como Ellyon era una inocente princesa feliz, y el rosado de su burbuja le resultaba molesto, Luisina decidió hacer de las suyas.

En aquel día se anunció la llegada de Seth príncipe del reino de Imprudencia, venia de paso por Prudencia y se quedaría solo unos días.

El rey Hathor, le ofreció hospedaje en su palacio.

El príncipe agradeció y se dirigió al cuarto dónde dormiría durante esos días.

Asombrado por los lujos que le ofrecía el palacio decidió explorar aquel majestuoso lugar.

Ellyon se encontraba sentada en una de las bancas que adornaba los enormes jardines, leía uno de sus tantos libros.

De pronto escuchó pasos, despegó la mirada de su amigo, y se percató de la presencia de un desconocido.

Un sujeto con traje morado y negro, cabello negro que combinaba con su atuendo, ojos castaños muy peculiares.

“Hola?” Dijo Ellyon en voz alta.

El príncipe la observó, le llamo la atención la burbuja que la envolvía, se aproximó.

Se presentaron.

“Bienvenido” dijo sonriente Ellyon

El príncipe le devolvió la sonrisa y se dirigió al castillo.

Ellyon sintió por primera vez un cosquilleo en el estomago.

“Es muy apuesto no?” se escucho una voz aguda.

Era la malvada bruja.

“Quien eres?” pregunto la princesa.

“Una nueva amiga” sonrió con malicia la bruja.

Al anochecer la bruja haciéndose pasar por una de las mucamas, llevó café y galletas al cuarto del joven príncipe.

El príncipe las acepto y se tomó el café de un sorbo y las galletas de un solo bocado.

“Come mucho! Fue más fácil de lo que pensé” dijo Luisina satisfecha.

Lo que el príncipe no sabía es que el café que acababa de tomar tenía una pócima que hacía que las palabras de sentimientos le resultaran terroríficas, y las galletas, estaban envenenadas con la pócima de “reprimir los sentimientos” en resumen, el príncipe ya no podía expresar lo que sentía y saldría huyendo al primer movimiento.

Por otro lado Luisina descubrió que podía acabar con la magia de la burbuja rosada si lograba que Ellyon “hablara de más” dejara de ser tan prudente e inteligente.

Al día siguiente la princesa y el príncipe se toparon.

Comenzaron a platicar y en ese momento los dos sintieron una conexión muy extraña.

Ellyon se encontraba en su cuarto acostada, extrañada por lo que había ocurrido.

“Eso que estás sintiendo ahorita, es lo que lees sobre las princesas que se enamoran de los príncipes” dijo Luisina mientras intentaba salir del closet en el que se había escondido, preparando una salida dramática que no funcionó.

“Yo te voy a ayudar a que vivas tu cuento de hadas, confía en mi”

Luisina parecía una persona muy amable y Ellyon confió en ella.

A partir de aquel día Seth y la princesa se encontraron todas las mañanas y podían pasar horas platicando sobre absolutamente todo, se dieron cuenta de que tenían una conexión muy fuerte, y de un momento a otro se volvieron confidentes.

Un día la bruja le dijo a Ellyon que le platicara sobre un novio “clandestino” que la princesa había tenido hace unos años, que eso haría que el príncipe la conociera mejor.

La princesa siguió sus consejos y le platicó, el príncipe por alguna razón se sintió incomodo y se alejo un poco de ella.

La capa de la burbuja se hizo un poco más ligera.

Pero ese no fue un bache para que los 2 jóvenes continuaran platicando y la conexión se volviera cada vez más fuerte.

La princesa se sentía emocionada, sentía que había encontrado un complemento perfecto, lo quería, se querían, se entendían bastante bien.

Luisina, entonces, le aconsejó que hablara sobre los sentimientos que sentía por el que fue su novio, para que así el príncipe se relacionara más con ella.

El príncipe se alejó un poco más, la capa de la burbuja se volvía más delgada.

Ellyon no sabía que ocurría.

Había llegado el día en el que el príncipe tenía que marcharse, sin embargo decidió quedarse unos días más, se sentía muy cómodo con la compañía de Ellyon.

“Sentirá lo mismo por mi? En realidad, qué sentimos?” se preguntaba la pequeña princesa una y otra vez.

“La única forma de descubrirlo, es diciéndole absolutamente todo lo que sientes, todo lo que eres, sin guardarte nada, y así podrás saber que sienten los dos” dijo la horrible bruja con su detestable voz aguda.

Y así lo hizo Ellyon.

En ese momento la burbuja rosa que envolvía a la princesa desapareció junto con la conexión que había entre los dos.

Se había cumplido lo que la bruja había descubierto, Ellyon había hablado de más y había dejado de parecer inteligente a la hora de manejar sus sentimientos, lo que provocó que la burbuja se desintegrara.

El príncipe se marchó ese mismo día.

La horrible bruja de dientes enormes rió victoriosamente y desapareció buscando una nueva víctima.

Y ahí quedo Ellyon, lágrimas inundaron su rostro por primera vez, sentía tristeza por primera vez.

El hada se percató de aquello, no podía devolverle la burbuja, sin embargo le lanzó un noble hechizo, el de aprender de los errores, y un caramelo de la segunda oportunidad.

Y así la joven princesa aprendió una gran lección ese día.

Hay personas que nos hacen sentir una conexión inimaginable, con las que podemos platicar sin problemas de todas las cosas, y es tan fuerte esa conexión y el sentimiento es tan intenso, que queremos apresurar las cosas, queremos que él o ella nos conozca por completo, así sin más nos entregamos con palabras a la otra persona.

Ellyon aprendió que la prudencia está en decir solo lo básico en la plática, y dejar que lo demás la otra persona lo vaya descubriendo con experiencias que vivan juntos, ahí es donde la verdadera magia permanece, el irse descubriendo el uno al otro.

De haber sido así, el hechizo que tenía aquel príncipe ni siquiera se hubiera notado.

Y en cuanto a ser prudentes con los sentimientos, el hada le dijo a la princesa, que el valor del sentimiento se pierde cuando son más las palabras que lo que realmente se demuestra, también le dijo que cuando realmente sientes esa conexión, las palabras sobran, porque los 2 saben con exactitud qué es lo que sienten.

Lamentablemente este cuento de hadas no tuvo un final feliz como todos los demás, sin embargo, Ellyon aun conserva el caramelo de la 2 oportunidad, y ahora, ya sabe que tal vez, en algún momento se vuelva a encontrar con el príncipe, y así poder utilizar su caramelo, y si no regresa, usar ese caramelo con algún otro príncipe que desee hospedarse unos días en aquel maravilloso palacio.
Ellyon ya no tiene la burbuja que la alejaba de la tristeza y del sufrimiento, y ahora está más expuesta que antes, pero también ahora la princesa tiene la capacidad de ver con más claridad que antes, aprendió a saber realmente cuando es “Mejor que no lo digas.”

Y así, vivió, se dejó llevar, y disfrutó, por siempre.

FIN.

6.12.11

No me llames novia.

Estaba pensando...
Hace un par de meses tuve "algo" con un chico... Duramos 9 meses con ese "algo"...
Y he de admitir que la pasábamos bastante bien juntos y que nos queríamos mucho...
En ese tiempo yo no me bese con nadie, y bueno, supongo el tampoco...
Iba a verme a mi casa, chateábamos diario, nos dábamos detallitos, íbamos de la mano a donde sea, nos respetábamos mucho, etc...
El problema fue que de pronto (por presión de un mal amigo) yo comenzaba a sentir la responsabilidad de ser "su novia"...
Así que lo intente...
No paso más de 3 semanas y cortamos...
Porque habíamos estado tan bien durante esos 9 meses, y justo cuando decidí "darle el titulo" se arruinó?
Creo que el verdadero "problema" radica ahí...
Cuando queremos darle el "titulo" a esa persona especial de "novio" o "novia"...
A veces siento que en ese momento nos "marcamos" como "posesión de alguien"...
Como que el decir que eres "novi@" de alguien te hace menos libre...
Y siento que ahí es cuando comenzamos a sentir que "tenemos" que hacer cosas por nuestros novi@s cuando en realidad debería de "nacernos"...
Últimamente las "relaciones" con "titulo" que he tenido han sido pasajeras...
No duran mas de un mes...
Y es que es cuando yo comienzo a sentir que esa persona se vuelve ya una "obligación" ...
Se que esta mal y que no debería de ser así...
Pero... No les ha pasado?
"No puedo, TENGO novia"
"TENGO que ir a ver a mi novio"
"TENGO que comprarle algo a mi novia porque ya es su cumpleaños, por Navidad, etc"
Y el famoso mes...
Nos vemos envueltos en un gran conflicto porque ya vamos a "cumplir un mes" y no sabemos que regalar, y pedimos ayuda y nos genera un verdadero estrés porque sabemos que nuestr@ novi@ va a llegar con algo y se va a enojar si no le damos algo
O al revés, he escuchado a varias niñas decir "no sabes como le va a ir si no se acuerda de que el Lunes cumplimos otro mes"
"Rayos! TENIA que marcarle a mi novio y no lo hice!"
Y ahí siento que se vuelve algo mas falso que real...
Que feo que sea así...
No soy fiel creyente de ese tipo de títulos porque creo que si realmente quieres a una persona, le vas a ser fiel a su cariño, no vas a necesitar ver o estar con alguien mas, y vas a querer llenarlo de todo el cariño que tengas, sin necesidad de llamarlo "novio" o "novia"...
Llamarnos así no nos hace mejores "parejas"
He de confesar que hace poco llego un chico que me gusta mucho, y salimos y somos "algo".
La verdad la paso bastante bien y comienzo a quererlo...
Pero en el momento en el que la palabra "novio" llega a mi cabeza, me aterro, comienzo a sentir un poco de "hartazgo" y opto por sacudir mi cabeza y no pensar en aquello...
Y es que, para ser sincera soy una persona bastante "egoísta" con mi tiempo y bastante "independiente"...
Y no quiero sentir que se puede volver una "responsabilidad"...
Creo que es injusto para los dos...
Creo que me da miedo pensar que de pronto el vernos, los detalles, hasta lo que nos decimos se vuelva una "obligación"...
No sé... Esta vez solo digo lo que pienso y no doy consejos...
Y esque de verdad, en mi caso, yo disfruto mucho más el hacer las cosas con "libertad" y porque me nacen, a hacerlas por "obligación"...
Si logramos encontrar a una persona que realmente se preocupe por eso, a darnos el "titulo" hemos encontrado a la persona correcta.
Creo que todo sería más fácil si la sociedad dejara de preocuparse taaanto por los "títulos" y por los demás y se preocupara más por lo que realmente importa...
Que para mí, lo más importante es el cariño, amor, etc, que tienes con esa persona y lo que haces para que este feliz, que eso a fin de cuentas, si de verdad l@ quieres también te va a hacer feliz...

5.12.11

Sacudiendo el miedo...

Primero... Una disculpa... No había encontrado inspiración...
Hoy salía de mis clases de francés...
Iba con prisa, distraída, y claro, como es costumbre me perdí...
Llegué a una calle angosta en una colonia muy bonita pero con mucho trafico...
Y en lo que el trafico avanzaba comencé a observar lo que había a mi alrededor...
Me sorprendí al ver a varias parejas de novios dejando rastro de amor por donde pasaban...
"Y usted... Tiene novio?"
Me preguntaron...
"No" contesté...
"Y porqué?"
"La verdad no lo sé"
Veía a todas estas parejas, las veía tan felices, tan enamoradas, y me acordé de la última vez que estuve así, que sin duda me encantaría volver a vivirlo… 
Volver a sentir el "amor" de una pareja… 
Pero por otro lado también se que mientras mas grande sea, y más crezca, al final duele mas… 
Claro que no debería de ser asi… Ni yo debería de pensar así...
Claro que no debería de importarme y debería de arriesgarme me lo han dicho mil veces y YO lo se... 
Pero me da tanto miedo que me vuelva a doler TANTO.. 
O peor... que me duela a un mas… 
Cuates me invitan a salir… 
Cuates han querido ser mi pareja… 
Me han ofrecido todo… 
Y yo los he rechazado… 
O cuando me doy valor y acepto… 
Termino por llenarme de miedo de nuevo y retractarme… 
Y termino lastimando a ese alguien…. 
Siempre es igual… 
Hasta que llegue a un punto en el que decidí mejor nisiquiera pensar en eso…  Siempre he dicho que solo existen 2 sentimientos… 
El amor y el miedo… 
El amor abre puertas… 
Crea puentes… 
Te da alas… 
Te libera… 
El miedo hace todo lo contrario… 
El miedo te limita… 
Por miedo muchas veces nosotros no hacemos cosas… 
O no tomamos oportunidades… 
El miedo crea la envidia… 
El coraje… 
La tristeza… 
La frustración… 
Sientes envidia por miedo a ver que aquella persona es mejor… 
Sientes coraje como una expresión del miedo a la impotencia…. 
La tristeza por miedo a sufrir… 
Y por miedo sientes frustración porque crees que no puedes hacer nada al respecto… 
Claro que el miedo es un limitante… 
Pero creo que se vuelve uno si te dejas manipular por el… 
El miedo la mayoría de las veces llega a uno cuando se presenta algo completamente desconocido… 
Y es cuando nosotros debemos de decidir si nos volvemos valientes o nos dejamos dominar… 
Nunca he sido cobarde en ninguna situación… 
Creo yo que siempre he tenido las agallas para enfrentar la vida y los problemas que se me han enfrentado… 
Pero también creo que no hay peor dolor que el que sientes cuando pierdes a una persona que amas… 
Ya sea que haya muerto… 
Que te deje de amar… 
O que se haya marchado… 
Y es un dolor que requiere de mucho esfuerzo y apoyo para sanar… 
Aunque estoy segura que no hay nada peor que ser cobarde frente al amor…  
Porque entonces yo se que me he perdido de mucho por ese miedo…  
Simplemente tengo que respirar profundo un día y aventarme a esta aventura que es el amor… 
Como cuando saltas de un bongee… 
Reunir el valor suficiente para hacerlo… 
Mientras tanto trabajare en no acostumbrarme a vivir así… 
Porque después puede ser un poco tarde…

1.12.11

No quiero decir Adiós.

Recuerdo perfecto ese día.
Vacaciones de verano. Acabábamos de terminar al fin la secundaria.
Estábamos en aquel parque al que tanto me gustaba ir, sentados en una banca.
Yo estaba a un lado tuyo intentando tomar de mi café, no podía, estaba llorando desconsoladamente.
Y tu tomabas de mi mano, podía notar tu esfuerzo por regalarme las mejores palabras de aliento en ese momento. Me abrazabas, me dabas un beso en la frente y continuabas con aquellas palabras sin soltarme la mano.
Tome un cigarro y cuando me preparaba para prenderlo me lo quitaste y lo rompiste, me enojé por aquel gesto y dijiste "no tolero que te hagas daño Ale, no te vas a sentir mejor por fumar".
Te abrace fuertemente y te dije "No sé que haría sin ti Andrés"
Me diste un beso en la frente, me abrazaste más fuerte y me dijiste con una ligera y tierna risa sarcastica "Yo tampoco sé que harías sin mi, por eso aquí voy a estar siempre"
Y esa es una de tantos momentos especiales que recuerdo contigo.
De un momento a otro ya llevábamos 5 años de una amistad irrompible.
Tomamos diferentes caminos, pero eso nunca nos impidió seguir hablando, chatear diario, y claro, tu constante preocupación por mi bienestar.

Lunes por la noche sonó mi celular.
Eras tú.
"Alejandra! Me dejaste plantado el Viernes en la fiesta!"
"Perdón amore! Salí con mis amigos de la porra, pero prometo compensarlo"
"Te parece sí nos vemos este puente? Paso a verte a tu casa, comemos juntos y hacemos algo"
"Claro que sí! Te marco mañana en la noche para ponernos de acuerdo"
"De acuerdo, espero tu llamada, te extraño!"
"Yo también te extraño! Te prometo que nos vemos el miércoles!"
"Esta bien, te amo"
"Yo también te amo"
Colgamos.

El martes, me vi envuelta en miles de tareas de idiomas, en entrenamientos, etc, no pude marcarte.

Entonces el miércoles que desperté lo primero que hice fue marcarte, daba tono, sin embargo no contestabas. Volví a intentar, sin éxito.
"Seguramente sigue dormido"
Hice lo que todas las mañanas hago, me levanté y prendí mi computadora, en eso me llegó una mención en Twitter de una de mis mejores amigas de la secundaria.
"Ya te enteraste de la malisima noticia? Marcame, te amo"
Marque inmediatamente. Me contestó, llorando.
"Ale..." me dijo con voz temblorosa.
"Que pasó?" comenzaba a preocuparme
"Acaba de fallecer Andrés"
"Andrés?!?!"
"Sí, Andrés Vazques"
Mi mente se bloqueó, no sabía que contestar, que decir, recuerdo que le pregunté unas 5 veces si era cierto, lamentablemente en todas contestó que sí.
Nos pusimos de acuerdo inmediatamente para ir al funeral y colgamos.
Me senté en mi cama, paralizada.
Te marqué, no contestaste, volví a marcarte, no contestaste, te mandé un mensaje en messenger.
"Contéstame, más te vale que sea mentira, contéstame porfavor"
Volví a intentar, no tuve éxito.
"CONTÉSTAME!" grité.
Marqué otra vez, nada.
Aventé el teléfono. Puse mis manos sobre mi rostro, y comencé a sentir como me bañaba en mis lagrimas.
"No es cierto" pensé.
Al poco tiempo llegaron por mi, todavía no lo captaba.
Creo que mi mente en ese momento se descontroló, como si hubiera sufrido de algún corto circuito.
Había ratitos que reía, platicaba normal, y de pronto volvía a llorar.
Y estando ahí, vi el ataúd.
Todavía no creía que tu estuvieras ahí dentro.
Me acerqué a ver.
Definitivamente no eras tú, ni siquiera se parecía un poco a ti, eso me dio tranquilidad.
Sin embargo ahí estábamos todos tus seres queridos.
Te busqué, entre las personas, busqué por horas, pero no, no estabas, y todos decían que estabas dentro de esa caja.
Quien iba a decirlo amore, ya pasó un mes desde aquel día.
No termino de escribir todo lo que he sentido desde el 2 de Noviembre.
Por un lado, me entró un coraje muy enorme hacia ti.
Me acuerdo, en mi cuarto ese día, sola gritándote.
"Prometiste que siempre ibas a estar? Porque te fuiste? Porque no te despediste?"
Sentía que habías roto esa promesa. Y ni siquiera te habías tomado la molestia de despedirte de mí.
Porque si era tan especial para ti como me decías no te despediste? Porque no me contestabas el teléfono? Si siempre lo hacías? Porque el miércoles no pasaste a verme como habías quedado?
Simplemente... Porque me habías dejado?
Y luego ver a tú hermano llorar, lo amabas, porqué estabas permitiendo todo eso?
Después, culpa.
Porqué YO no me había despedido de ti? Porqué no fui a esa fiesta? Porqué no te marqué?
Y por último.
Nostalgia.
Despertar todos los días con el pensamiento de que ya no te iba a volver a escuchar, que ya no te iba a volver a ver, que ya no iba a haber un "mañana le marco, mañana lo veo" ya no.
Despertar todos los días con un hueco enorme en el estomago, sintiendo una presión horrible en el pecho.
Noches de insomnio durante todo este mes, porque simplemente, todas las noches soñaba contigo y despertaba llorando.
Sentía una necesidad horrible por sentirte cerca, un consuelo que me dijera que no te habías ido.
Compre un listón negro. Simbolizaba a ti.
Mi papá me dijo que platicara contigo todos los días, que te recordara, que así, poco a poco me iba a dar cuenta de que aquí seguías, y así lo hice, todas las noches antes de acostarme.
Sin embargo llegó aquella competencia, de la que año tras año siempre estuviste al pendiente, me recuerdo viendo fijamente el celular, esperando tu llamada de buena suerte, nada.
Entonces me senté a platicar contigo.
"No me dejes sola el día de hoy por favor" te dije viendo aquel listón.
Me acuerdo que subí al escenario y grité "Va por ti Andrés"
No quiero dramatizar lo que pasó y lo que sentí en ese momento, pero te juro por mi vida que sentí como me tomaste de la mano, como cada cuenta y cada paso de la rutina la hicimos juntos.
Entonces me di cuenta de que ahí estabas. De que no te habías ido del todo.
Desde ese momento no hay día que no hable contigo antes de dormir.
Te confieso ha sido un mes muy difícil para mi, un mes de sube y bajas, un mes inestable.
No hay día que no recuerde alguna anécdota juntos, que no te piense.
Y es que Andrés, un mes después, todavía es muy difícil aceptar lo que pasó.
Son muchos sentimientos sabes? Muchas cosas, tanto que pensar.
No puedo terminar de explicarme (y creo que nunca lo haré) como es que una persona como tú se haya marchado tan pronto.
Te lo dije una y otra vez, personas como tú faltan en este mundo.
He intentado manejar esto de todas las formas posibles, he leído hasta el cansancio, he platicado, he pedido consejos, y ninguna me quita este sentimiento tan grande de nostalgia que tengo, y ninguno llega a ser un buen consuelo.
Entonces supongo que mi mejor consuelo eres tú.
Hay tantas creencias sobre la muerte, la mente, el cuerpo, y el alma (y yo soy tan agnóstica) que ya no sé que creer a veces.
Sin embargo, un día te pedí que me regalaras una sonrisa, una sonrisa que solo tú me regalabas, en los momentos tan difíciles.
Al día siguiente yo iba en un taxi, y en mi celular aparecieron mil y un situaciones que me sacaron verdaderas sonrisas, inconscientemente miré al cielo y sonreí.
Creo que me estoy volviendo un poco loca porque sentí como los dos sonreímos y como tú me decías "Ahí lo tienes".
Y es que te siento conmigo Andrés, te lo juro, te siento TAN presente, que me es más difícil aceptar que ya no te puedo ver.
Te juro todos los días ruego por un minuto, solo un minuto, para volver a verte, volver a abrazarte, volver a decirte que te quiero con todo mi corazón, no más, solo quiero un minuto para despedirme.
No, definitivamente, todavía no termino de asimilar que te has marchado.
Sin embargo me gusta creer que te has ido de viaje, a un lugar maravilloso (de esos que siempre quisiste conocer) y que yo me detuve unos segundos en el camino (o bien, abusé de mi impuntualidad ja.) y que te voy a alcanzar un día, y así, una vez más, compartir juntos todo eso increíble que estas disfrutando donde estés.
No hay duda de que dejaste un gran vacío en el corazón de muchos con tu partida.
Y no cabe duda de que todos te vamos a extrañar siempre.
Si de algo te estoy eternamente agradecida es de todas las veces que me decías "no llores! sonríe! odio que llores!" o "se valiente Ale! Eres muy fuerte! No te dejes caer!"
Porque ahora, cada que derramo una lágrima te escucho, y dejo de hacerlo.
Es increíble Andrés que hasta con tu partida, nos sigas dejando tantas cosas positivas.
Nos uniste a todos, nos diste una lección a cada uno de nosotros, que estoy segura, llevamos en nuestro corazón día con día.
Sí, aun no puedo evitar llorar, pero quiero que sepas que estoy llorando porque te extraño físicamente, porque me hubiera gustado que compartiéramos de la misma forma muchas más anécdotas, porque voy a extrañar muchísimo tu voz, no porque no este segura de que ya no estás.
Porque definitivamente me has demostrado que no te fuiste, que simplemente te transformaste, en algo muchísimo más bello de lo que ya eras.
No cabe duda que en mi egoísmo, me hubiera gustado que todo esto pasara muchísimo después.
Pero me tranquiliza saber, que voy a poder compartir contigo toda mi vida, y que vas a estar a mi lado cada minuto.
Ya no quiero entender de las razones, porque las razones me van a alejar más de ti.
Yo lo único que quiero es seguir sintiéndote cerca.
Hoy, después de un mes, me sigue costando mucho trabajo aceptarlo, sin embargo no me rindo....
Porqué?
Por ti, porque tu nunca me dejaste caer, porque puedo sentir como me dices "LEVÁNTATE Y ALZA LA FRENTE", porque quiero que todos los días que me veas, te sientas orgulloso de mi, porque poniendo de ejemplo lo que he dicho en mis blogs pasados, quiero sacar algo bueno de esto para que valga la pena toda esa nostalgia y todo eso tan triste que siento.
Te prometo, te lo juro, no te voy a defraudar.
Porqué aunque ya no lo pueda escuchar, se que sigues estando al pendiente de mí y te sigues preocupando por mi bienestar.
No nos dejes solos, a ninguno de nosotros los que te queremos, no lo hagas porque te necesitamos con nosotros.
Te extraño físicamente.
Te amo.
http://www.youtube.com/watch?v=NJWIbIe0N90&ob=av3e

Soy feliz, y que?

Es la 1:17 de la mañana y todavía no se como empezar a escribir sobre mi blog*
Hoy me hicieron una pregunta que no pude responder con palabras exactas.
Querían que respondiera una pregunta muy sencilla de plantear y muy difícil de responder.
Qué es la felicidad?
No me había percatado que en el blog de "Me quiero enamorar" había escrito de que "estar enamorado" es un sentimiento de felicidad constante.
Pero si nos vamos un poco más a fondo, cómo podríamos realmente definir este concepto?
Estuve pensando y para empezar creo que el decir que somos "completamente felices" no quiere decir que TODO el tiempo estemos sonriendo, y que no tengamos problemas, o momentos desagradables.
Porque simplemente eso no existe.
Y bueno también saltó a mi la pregunta, "felicidad en comparación a que?" si no estoy siendo clara, déjame poner un ejemplo.
No puedes decir que un platillo te sabe delicioso, si no has probado uno desagradable.
O decir que una persona es "muy bella" cuando has visto otras tantas "feas".
Creo que para tener un concepto siempre necesitamos un punto de comparación.
Incluyendo la felicidad.
No sabríamos que es "estar felices" si no tuviéramos nuestro punto de comparación, o sea, la tristeza.
Si nunca en nuestra vida hubiéramos estado tristes, simplemente no nos daríamos cuenta de que somos felices, no se si me explico.
Siempre he definido el bienestar de una persona como una balanza, un equilibrio.
Cuando un lado de la balanza pesa más que la otra, nos encontramos en un punto de desequilibrio y descontrol en nuestra persona.
De un lado de la balanza espá todo eso positivo y evidentemente del otro su antónimo: "lo negativo", a lo que llamo "el mal necesario".
Sin ese mal necesario nosotros no podríamos tener nuestro punto de comparación y decir que estamos completamente felices.
Necesitamos llorar para darnos cuenta de cuando estamos sonriendo.
Curiosamente las personas que tienen la vida "más perfectas" (me refiero a personas sin problemas económicos, con una familia aparentemente perfecta, y que aparentemente no les falta nada) son las que tienen más vicios y las más desencarriladas, o bien, depresivas. Y si no, con problemas que cualquier ser humano. Porqué? Porque necesitan su mal necesario.
Si todo fuera perfecto y felicidad, creo que ni siquiera nos daríamos cuenta de que estamos felices.
Entonces.... La felicidad no as todo perfecto y alegre y cuenpo de Disneylandia? Déjame decirte que si has estado buscando eso, nunca lo vas a encontrar. Y si no es así? Para mí que es la felicidad?
Creo que la felicidad es un conjunto de situaciones, acontecimientos, momentos, etc, que nos hacen sentir tranquilos en nuestro interior.
Tanto como buenos, como malos.
Pero qué hacemos con esos momentos malos para alcanzar esa felicidad de la que te hablo?
Aceptar que son males necesarios, dar las gracias porque están ahí, porque si no, no sabrías que es felicidad.
Y disfrutar de TODO lo que se nos presenta, tenemos un problema? buscamos la forma de resolverlo en el momento, aunque nos cueste, y disfrutar hasta de resolver el problema.
Me he dado cuenta de que el ser humano tiene esa necesidad de quejarse de absolutamente TODO, de lo que tiene, de lo que no tiene, como si quisiéramos nunca ser felices, nos quejamos, no disfrutamos, lo sufrimos, y qué pasa después? Ahí estamos llorando porque nosotros no somos felices.
Pero la felicidad esta en UNO, en lo que tenemos, en como pensamos y con que mentalidad nos despertamos los días.
Piensa que si no tienes algo, es porque realmente no lo necesitas y puedes vivir sin ello, cuando necesitas algo, la vida te lo da, eso es un hecho.
Pero no, ahí estamos envidiando y deseando todo lo que no tenemos, y lo que tenemos?, estamos tan concentrados en lo otro que ni siquiera lo disfrutamos.
Creo que también la felicidad es tener la capacidad de agradecer y aprovechar.
Nunca escribo algo que no estoy dispuesta a defender con hechos, y si te platico esto hoy, es porque así pienso y lo aplico yo.
No quiero que me proyectes como una persona que todo el tiempo está sonriendo, y va caminando mientras va dejando pétalos de rosa por donde pasa, amando a todo el mundo.
Soy ser humano, y también me siento triste, y también lloro, también me enojo, y hay personas que me caen sumamente mal.
Pero intento salir a la calle siempre con la mentalidad de aprender algo, lo que sea, por más absurdo que parezca, y curiosamente siempre procuro sacarle una sonrisa a alguien.
Por ejemplo comprar un chocolate y regalárselo a una niña que vive en la calle.
Disfutar... Se me antojó un café? Lo compro y me lo tomo, quiero leer? Leo.
Y las obligaciones pienso "lo tengo que hacer a fuerzas, aunque no quiera, estoy obligada a... Entonces, de hacerlo de mala gana y mal, prefiero hacerlo bien e intentarlo hacer de la manera más positiva que pueda"
A eso le llamo alimento para el alma entonces que pasa cuando se me presenta una situación negativa?
Intento detenerme a pensar y digo "a ver, qué bueno puedo saca de todo esto? Me va a dejar algo para progresar? Si? Pues vamos a aplicarlo" y súmale que ya habré alimentado mi alma lo suficiente para ser fuerte y ser valiente y seguir adelante.
Creo que una persona feliz es aquella que carece de sentimientos negativos hacia los demás, que es valiente, que es fuerte, y como dije antes, que se siente tranquila.
No te sientes tranquilo? Te sientes inestable?
Detente a pensar porque, que te está causando eso, e intenta CAMBIARLO, no ELIMINARLO, porque si lo desapareces, corres el riesgo de que vuelva a aparecer, por lo contrario si lo cambias, ya no puede volver a aparecer, porque ahí sigue, solo que ya transformado en algo positivo.
Y regresamos a lo mismo, ENAMORATE, de ti y de tu vida.
Y da las gracias de lo que tienes y de lo que no tienes también.
Y si todo lo que te escribí te parece muy cursi, lo dejaré en algo muy sencillo..
Ya estamos aquí, en este mundo, con la familia y la situación que nos tocó, y no sabemos, de verdad no sabemos cuanto tiempo vamos a vivir, entonces, si no nos queda de ktra, que prefieres? Estar todo el tiempo de malas y con acidez encima (que es muy desgastante)? O bien sonreír y VIVIR, y cuando te toque irte, despedirte con un "estoy satisfecho con mi vida".
Créeme, a mí me ha funcionado.