Nunca había conocido a la mujer más fuerte hasta hace poco.
Siempre me imagine a la mujer más fuerte como una mujer de
cuerpo escultural, con el cabello bailando con el viento, diminuta ropa y un
escudo. Algo así como una heroína de comic.
Pero no, definitivamente no es así, la mujer más fuerte a
pesar de ser una heroína no parece haber salido de un comic.
La mujer más fuerte es una mujer hermosa, una mujer con un
cuerpo singular, un cuerpo que con solo verlo te platica historias, historias
que conmueven.
La mujer más fuerte es hermosa porque lleva consigo marcas
de su eterna lucha, de todas sus batallas que ha logrado combatir exitosamente.
La mujer más fuerte existe, y yo la conozco.
Una mujer que ha luchado a lo largo de toda su vida por algo
que nosotros a veces olvidamos hacer; vivir.
Y no vivir confundido con sobrevivir, si no realmente vivir.
La mujer más fuerte que también es la mujer más hermosa que día
con día lucha con sentirse viva, con disfrutar cada cosa que le rodea, con
sentir el viento mientras camina por el gran distrito, sentir el pensamiento de
sus alumnos al escribir.
La mujer más fuerte siente y vive lo que siente.
La mujer más fuerte y más hermosa se ha enfrentado a un
sinfín de acontecimientos que han puesto en prueba su fortaleza, desde aspectos
físicos (combatiendo enfermedades) hasta aspectos del psique: el dolor. El
dolor que no puedes quitar con medicinas, o con un alimento sano. Ese dolor más
difícil de quitar que es solo con el paso del tiempo.
La mujer más fuerte al enfrentar cada adversidad, cada
batalla sonríe, y se ríe al respecto. Y no porque no le dificulte salir
adelante, si no que se ríe porque el reír la hace más fuerte. Y por eso ella
además de ser la mujer más fuerte es la mujer más hermosa.
La mujer más hermosa es ese ejemplo a seguir de quienes la
rodeamos, es esa imagen de admiración de quienes tenemos; quienes la vemos, la
vemos como la mujer más hermosa.
La mujer más hermosa no solo deslumbra con la belleza de su
sonrisa, de su corazón, y de su carcajada. La mujer más fuerte deslumbra
también al hablar, y más al escribir.
La mujer más hermosa conmueve al escribir.
La mujer más hermosa te deleita con su compañía, que al
mirarla camuflajea cualquier malestar o enemigo que la perturbe, porque la
mujer más hermosa sabe que es la mujer más fuerte y que eso no la va a
derrotar.
La mujer más fuerte es la mujer más hermosa también porque
es la mujer más autentica.
Porque no existe personaje más autentico que ella.
La mujer más fuerte, también ha sido la mujer más débil, una
mujer que también con el pequeño susurro de un “no te quiero” se ha
quebrantado.
Pero su fortaleza radica en que ella se ha reparado sola, ha
buscado inteligentemente la forma de repararse y de combatir ante los obstáculos
que el universo le ha puesto.
La mujer más hermosa se refugia en quienes la quieren.
La mujer más fuerte recarga sus fuerzas en el abrazo de un
ser querido, o en una buena copa de vino acompañada de una buena platica.
Yo, cuando sea grande, quiero ser como la mujer más fuerte
que es también es la mujer más hermosa. Por el simple hecho de que cuando
enfrento algo que puede derrotarme, ahora mi primera imagen es la mujer más
fuerte, porque nunca se ha dejado vencer, ni lo hará.